Ayer, viernes 19 de abril, fue asesinado el defensor ambiental Victorio Dariquebe Gerewa, guardabosques de la Reserva Comunal Amarakaeri, ubicada entre las regiones de Cusco y Madre de Dios.
Según primeras versiones Dariquebe fue emboscado cuando se trasladaba desde la comunidad nativa de Queros, a la cual pertenece, hacia la zona de Pilcopata, y atacado con un arma de fuego por personas por identificar. La Fiscalía de Cusco y la Policía Nacional se han trasladado a la zona para iniciar con las investigaciones.

Victorio Dariquebe pertenecía a la etnia Harakbut y al pueblo Wachipaeri. Fue parte de una delegación que en 2015 llevó sus costumbres ancestrales como el uso del arco y flecha al “Smithsonian Folklife Festival” que se realizó en Washington D. C., Estados Unidos. El defensor deja dos hijos en la orfandad. Distintas organizaciones de conservación han condenado el hecho.
La reserva de Amarakaeri es un área natural protegida desde 2002 que cubre un área de más de 400 mil hectáreas. Tiene un sistema de administración compartido entre las comunidades nativas que ocupan la zona y el Estado, a través del Servicio Nacional de Áreas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp).

La Reserva de Amarakaeri viene siendo asediada por economías ilegales como la minería ilegal, tala ilegal y el narcotráfico, que se han asentado en la zona este y sur de la reserva. Las amenazas a los defensores ambientales y dirigentes comunales, según fuentes confiables, son pan de cada día en la zona.
Ignacio Sánchez, secretario general del Sindicato del Sernanp, condenó el hecho e indicó que la institución tiene en abandono a los guardaparques a nivel nacional, quienes “solo reciben un sueldo de S/ 1700”. Esta situación, según indicó a EL FOCO, se agravó con los retrasos a la promulgación de la Ley del Cuerpo de Guardaparques, que fue observada por el gobierno de Dina Boluarte, y la aprobación de la llamada “Ley Antiforestal” que dio el Congreso en enero de este año.