Los proveedores incumplieron con el cronograma y los dispositivos que llegaron no tienen las aplicaciones acordadas. Además, empresa de los cargadores solares se burla del contrato firmado con el ministerio.
La organización creada por Shack obtuvo contratos con el Estado entre el 2017 y 2018, pese a tener impedimentos legales. Dos de sus exmiembros ocuparon altos cargos en la Contraloría.
Los más beneficiados con el conflicto, que incluye incautaciones y denuncias, son los numerosos investigados por las redes de corrupción que aún existen en el primer puerto.
La entidad que dirige Pilar Mazzetti se niega a pagar a proveedor de balones de oxígeno y a empresa que reparó ventiladores mecánicos durante los meses más duros de la pandemia.