Hace dos semanas el periodista Enrique Chávez Durán estuvo bajo la mirada pública cuando fue inesperadamente despedido de TV Perú, su casa televisiva durante los últimos siete años y donde conducía el noticiero central y el programa de entrevistas “Cara a Cara”. Propio de una ruptura poco amistosa, su salida se dio entre acusaciones de “recorte de pluralidad” en contra del canal de todos los peruanos. Pero un hecho ocurrido al interior de la revista “Caretas”, donde Chávez es director desde hace tres años, nos hace preguntarnos sobre su verdadero sentido de pluralidad.
El 24 de febrero, fuera ya de TV Perú, Chávez compartió en su cuenta de Twitter la portada del último número de “Caretas”. Con buen ánimo contó a sus seguidores que la edición estaba “muy entretenida”. Dentro de las páginas del medio que dirige, entre algunos de los muchos líos del Gobierno de Pedro Castillo y la guerra entre Ucrania, y Rusia se encontraba una particular entrevista a la que se le dedican tres páginas y con un tono condescendiente.

El personaje protagónico fue Samuel Dyer Ampudia, empresario huanuqueño y dueño de múltiples empresas en el rubro acuícola y agrícola, entre ellas la poderosa agroexportadora Camposol y Reforestadora Inca SAC (Refinca), que se ubica en la región Ucayali. La entrevista fue hecha por el periodista Carlos Cabanillas, pero no la firmó con su nombre sino solo sus iniciales: CC.
En la nota de puro color, que tiene todos los ingredientes de un «publireportaje», Dyer habla del crecimiento del rubro agroexportador, las ventajas competitivas de la Amazonía peruana y del viaje que hizo, en septiembre del año pasado, junto con el presidente Pedro Castillo. Dyer viajó como parte de la comitiva oficial y lo hizo en representación del Grupo Pro Amazonía, del cual es fundador y cabeza principal.
Cuando esta nota llegó a las manos del periodista y colaborador de “Caretas” Hugo Alejos, su reacción inmediata fue intentar contactar a su colega Carlos Cabanillas y enviarle información que podía ser de su interés: los videos de una brutal y desmedida represión policial contra agricultores y ronderos, orquestada por la empresa Refinca, de propiedad de Samuel Dyer.

Pese a los reiterados mensajes, Cabanillas nunca respondió a Alejos. Carlos Cabanillas, jefe de edición de “Caretas”, es desde agosto pasado también jefe del Fondo Editorial del Congreso y consultor y colaborador de la revista social “Cosas”. La tercera vicepresidenta del Parlamento, Patricia Chirinos, fue quien nombró a Cabanillas como jefe del Fondo Editorial. En comunicación con EL FOCO, Cabanillas dijo sobre los mensajes que le envió Alejos: “No hablo con Hugo desde hace mucho”.
Hugo Enrique Alejos La Rosa es un periodista y reportero gráfico radicado hace cinco años en Pucallpa. Ha colaborado con “Caretas” desde mediados del 2010, así como con el semanario “Hildebrandt en sus trece” y otros medios locales e internacionales. Alejos ha vivido en carne propia el poder que ejerce Samuel Dyer en la región donde reside y por eso decidió redactar una nota en respuesta al “publicherry” que le dedicó “Caretas”. La nota que hizo Alejos fue publicada el 1 de marzo en la versión web de Caretas, pero no pasó ni dos horas y fue borrada intempestivamente.
En el texto, cuyo título original fue “Los oscuros intereses de Samuel Dyer en la Amazonía”, Alejos relató la violenta disputa por el Fundo Tournavista por parte de los agricultores de San Juan de Pumayacu (Ucayali) y San Juan de Semuya (Huánuco) contra la empresa Refinca Holding SAC, de Dyer.

A través de testimonios de los representantes de las rondas campesinas de Ucayali y Honoria, Alejos relató cómo Refinca, a través de la empresa de seguridad Hisar SAC, coordinó con la Policía Nacional acciones de represión y amedrentamiento en contra de los agricultores. El accionar de la Policía ha despertado el interés de la Fiscalía Corporativa Especializada en Delitos de Corrupción, que ha iniciado investigaciones en torno a este hecho.
La crónica de la disputa entre Dyer y los comuneros ha sido cubierta por “La Voz Ucayalina”, medio que dirige Alejos y que ha provocado que sea víctima de constantes amenazas por parte de Refinca. Dyer y su grupo de abogados han inundado la oficina de Alejos en Ucayali con un sinfín de cartas notariales, amenazando con iniciar acciones penales en su contra. La misma “Caretas” ayudó a difundir un comunicado del Instituto de Prensa y Sociedad (IPYS) sobre los peligros a los que están expuestos los periodistas en Ucayali, entre ellos Hugo Alejos.
Pero eso parece no haber sido suficiente para la dirección de “Caretas”, que decidió retirar, sin explicación alguna para sus lectores, la nota contra Samuel Dyer. La decisión la tomó Enrique Chávez, el director de “Caretas” y hasta hace poco defensor del “pluralismo” periodístico. Según reconoció a EL FOCO, Chávez decidió retirarla luego de que recibiera la llamada de Francesca Carnesella, quien es asesora de Prensa e imagen de Samuel Dyer.

“Esa nota sencillamente no debió salir”, afirmó Enrique Chávez, en entrevista telefónica con EL FOCO. “Hugo tiene una controversia con este grupo empresarial, nada de eso fue informado. Entonces yo decido levantar la nota hasta hacer la evaluación. Y cuando hemos hecho la evaluación, pues resulta que las fuentes tienen denuncias. Es una nota completamente sesgada y no debió publicarse”, agregó Chávez.
La respuesta de Hugo Alejos al argumento de Chávez es: “¡Por supuesto que tienen que estar denunciados, si son ronderos! Se meten a defender un asentamiento humano, los del sector privado siempre los van a denunciar”.
Es notoria la diferencia con que trató “Caretas” a la versión de Dyer y la los ronderos. La del empresario fue publicada con bombos y platillos en tres páginas a color de la versión impresa de la revista, en donde se resaltan las “buenas prácticas” del grupo de Dyer Ampudia. La versión de los ronderos no duró ni dos horas en el internet.
Al cierre de esta edición, a la oficina de Alejos en Pucallpa llegó la más reciente carta notarial firmada por el gerente de Refinca, Javier Rivera Pinzas, por motivo de la corta vida de su nota en la web de “Caretas”. A Samuel Dyer al parecer no le bastó con presionar para que Chávez la retire.

Enrique Chávez ha negado que se trate de un caso de censura dentro de la histórica revista de Enrique Zileri, y también niega que la pomposa entrevista a Samuel Dyer tenga algo que ver con su decisión editorial. “No hay ningún tipo de presión”, dijo. Pero recordemos que a su salida del programa Cara a Cara, transmitido por TV Perú, Chávez también denunció presiones para concretar su despido.
Fuera de los estudios del canal del Estado, ¿la pluralidad seguirá siendo una prioridad para Enrique Chávez?